Vivir la infancia bien es clave porque esta etapa influye decisivamente en la vida adulta. Aquí te damos más detalles y damos consejos para ayudar a que tus hijos sean felices durante esta fase.
¿Por qué es importante vivir la infancia de forma adecuada?
Hay varios motivos importantes por los que vivir la infancia bien es esencial. Aquí destacamos los que consideramos de mayor relevancia
Desarrollo cerebral
Lo primero que has de tener presente es que el desarrollo cerebral se da, sobre todo, en los primeros años de vida. Y también la adquisición de determinados patrones de conducta. Por lo tanto, cuanto mayor sea el background de experiencias positivas y menos traumas se experimenten, mejor se desarrollará el cerebro.
Autoestima
Las experiencias en la infancia, sean buenas o malas, influyen decisivamente en la autoestima. Una infancia satisfactoria y feliz, siempre que se pongan límites, contribuirá a estructurar un ego bien formado. Una persona con autoestima, en su justa medida, tendrá más posibilidades de ser feliz.
Posibilidades de desarrollo personal
Las posibilidades de desarrollo personal son mayores si se tiene una infancia feliz. ¿Por qué decimos eso? Porque una infancia feliz, con buenas relaciones personales y con apertura ayudará a que el adulto consiga todo lo que se proponga. Es pues, fundamental contribuir durante este periodo.
Menos posibilidades de tener depresión
Otro de los motivos por los que es crucial una infancia feliz es que las posibilidades de tener depresión durante la edad adulta se reducen sustancialmente. ¡Ojo!, esto no significa que falten problemas y dificultades durante la edad adulta, pero tener buenos recuerdos de niño contribuye, y mucho.
¿Qué ayuda a vivir una infancia feliz?
Hay algunos aspectos que son positivos para vivir la infancia bien. Los más importantes son estos:
Entorno familiar estructurado
Un entorno familiar estructurado es bueno para vivir una infancia feliz. Y esto implica que las figuras materna o paterna estén presentes cuando tienen que estar. Si se cumple esta premisa, los niños vivirán felices y con confianza en que sus referentes no les van a fallar. Una buena relación paternofilial es decisiva, en este sentido.
Establecimiento de límites sanos
Las madres o los padres tienen que establecer límites para que los niños sepan que no todo es posible. Y, lo que es más, que puedan gestionar la frustración correctamente desde bien pronto. Esto va a ser muy útil para que, cuando maduren, no tengan estos problemas.
Seguridad económica
La seguridad económica del núcleo familiar es vital para que los niños no tengan más estrés que el necesario. Los pequeños captan las situaciones de escasez, y esa inseguridad la llevarán dentro cuando crezcan.
Socialización con sus iguales
La socialización de los niños con sus iguales es relevante para que puedan compartir pareceres y para que se inserten en el entorno. El ser humano es un ser social, y el aislamiento en ningún caso es conveniente. Piensa que los niños, en el futuro, serán adultos y han de saber relacionarse.
Ocio en familia
El ocio en familia es otro de los aspectos que son positivos para que un niño sea feliz. Ir de paseo, jugar juntos o ir al parque de atracciones son actividades muy gratificantes que conviene cultivar.
Conclusión
Vivir la infancia adecuadamente es un plus para que, cuando tus hijos sean adultos, gestionen correctamente los contratiempos y sepan tomar decisiones conscientes. ¿Tienes algo que te impide avanzar y que quieres sanar? En Emocodificación te ayudo. ¡Contáctame!