¿Cómo funciona la mente?

Entendemos como mente a todos los procesos que se dan en nuestro cerebro que proporcionan consciencia y que son subjetivos. Esta es una parte esencial de nuestro ser, así que te conviene saber cómo funciona. En este artículo, te explico cuál es el funcionamiento del cerebro, fundamental en los procesos mentales.

El cerebro como “músculo” que aprende

Tradicionalmente, se ha considerado que el cerebro es un “músculo” que aprende. Este es un punto fundamental y cierto, habida cuenta que, con el tiempo, hay capacidades que se pueden y deben entrenar.

La plasticidad cerebral es habitual durante la infancia. Se dice que “los niños son como una esponja”, pero eso tiene una razón, porque las conexiones cerebrales se están formando, así como el cerebro, que gana tamaño y peso. Y, además, hay más neuronas y, lo que es más, más conexiones disponibles que se pueden aprovechar. Esto no implica que no se pueda aprender a lo largo de la vida, pero sí es verdad que esa frescura es propia de la primera infancia.

El cerebro y los procesos mentales funcionan, en gran parte, mediante automatismos. Este es el caso de las neuronas espejo, que son la imitación. La cuestión es que imitamos lo bueno, pero también lo malo. Evitar malos hábitos o patrones de conducta poco saludables es fundamental. Y la solución está en el entrenamiento del cerebro durante toda la vida.

No obstante, hay que señalar que el entrenamiento obliga a ser constante. Aquí hablamos acerca de cómo trabajar las sinapsis para mejorar tu salud mental.

Las sinapsis, entrenarlas cotidianamente para una mente sana

Conocemos como sinapsis a las distintas conexiones que existen entre neuronas y que pueden variar a lo largo de la vida. Uno de los problemas de las personas adultas es que esa falta de entrenamiento te obliga a trabajarlas otra vez.

Existen varias formas de entrenar las sinapsis, no solo para aprender más, sino para tener una vida más plena. Destacamos los siguientes casos:

  • Meditación: la meditación, como suspensión del juicio, permite que pasen los pensamientos de forma natural hasta llegar a un punto de tranquilidad. Existen varias formas de meditar, pero a veces con relajarse en un espacio tranquilo y seguro es suficiente.
  • Mindfulness: a diferencia de lo que sucede con la meditación, el mindfulness, de origen budista, se centra en la atención plena en un punto. Esto proporciona, a la larga, mayor capacidad de aprendizaje y de concentración. Por eso, incluso se utiliza en algunas empresas como programa.
  • Yoga: el yoga, que combina meditación con distintas posturas (asanas), es una buena opción de combinar cuerpo y mente. Hace décadas que es popular y tiene un papel importante.

De esta manera, las sinapsis se pueden entrenar para mejorar la calidad de vida. Y, sobre todo, para que la mente no nos juegue malas pasadas. El exceso de futuro, el estrés o la falta de concentración suelen ser enemigos. Pues bien, con estos métodos, es posible mejorar.

La salud mental como base

Es cierto que la mente tiene numerosos procesos complejos que, a veces, nos abruman. La buena noticia es que, hoy, existen numerosas posibilidades para conseguirlo. ¿Necesitas ayuda? Contáctame sin compromiso y hablamos.