Los hábitos de vida son aquellas conductas que repetimos de forma recurrente y que no nos implican gran esfuerzo. En ocasiones, esta repetición es casi inconsciente, porque el nivel de interiorización que hay es muy alto. Pero es bueno hacerse la pregunta de por qué los adquirimos. De esto habla este artículo…
Por qué adquirimos hábitos de vida
Lo primero que hay que señalar es que existen hábitos de vida de adquisición más o menos complicada, más o menos automática. No debemos obviar este punto, porque es central, dado que existen hábitos positivos y hábitos negativos. También debes saber que no a todas las personas les implica el mismo coste la adquisición de un hábito.
El mecanismo por el cual adquirimos un hábito de vida es, fundamentalmente, cerebral. Recordemos que nuestras neuronas están interconectadas mediante sinapsis, pero que estas conexiones pueden variar a lo largo del tiempo. A nuestro cerebro no le gusta mucho gastar más energía de la estrictamente necesaria, de ahí que priorice esas synapsis ya establecidas. Hete aquí cómo se adquiere un hábito.
Como hemos dicho antes, según la persona, un hábito resulta más o menos difícil de adquirir. No en vano, la disposición de las neuronas es distinta y la genética, los factores ambientales o el momento de la vida en que estamos influyen, y mucho. Para que nos hagamos una idea, los hábitos pueden representar hasta el 40 % de nuestras conductas.
Hay un aspecto importante que comentar: estas synapsis pueden cambiar a base de esfuerzo. Hay hábitos que se adquieren de forma automática, pero otros se cultivan a través del esfuerzo y la constancia. Un caso paradigmático es el del estudio constante, así que podemos educar al cerebro.
Beneficios de los hábitos de vida positivos
Si un hábito vital es positivo, este aporta diversos beneficios para nosotros. Podemos destacar estos, de entre los más importantes:
- Mejora nuestra respuesta cerebral: si adquirimos hábitos positivos, el cerebro responderá mejor ante las situaciones que se presenten. Y esto es bueno, habida cuenta de que retrasa el envejecimiento, ya es bueno de por sí.
- Cuesta menos realizar las acciones: hay acciones que son tediosas, sí, pero si el cerebro está habituado, gasta menos energía. Y, lo que es más, conseguirás resultados productivos sin tanto esfuerzo, una vez que estés habituad@. Quien quiera mejorar la gestión del tiempo lo tendrá más fácil.
- Mejoras tu autoestima: ver que eres capaz de cambiar hábitos poco saludables es bueno para ti porque te sentirás mejor. No es un secreto que una buena autoestima es fundamental para que te resulte más fácil emprender nuevos proyectos. En definitiva, es una forma de empoderarse.
Por lo tanto, una tabla de hábitos positivos adquiridos durante el tiempo es recomendable para mejorar tu salud, en todos los sentidos.
¡Mejora tus hábitos para vivir mejor!
Los hábitos de vida nos marcan, para bien y para mal, pero la buena noticia es que nosotros los podemos cambiar. ¿Te cuesta darle la vuelta a alguno de tus hábitos? En Emocodificación te puedo ayudar a desbloquear aquellas situaciones que te generan dificultad. ¡Contáctame y hablamos!