El uso de la tecnología en las relaciones sociales es un hecho irreversible: telefonía, mensajería instantánea, redes sociales, apps… Hoy conocer a otras personas de forma telemática es habitual. Por lo tanto, es bueno saber qué ventajas y desventajas tienen las tecnologías para utilizarlas en tu favor.
Tecnología en relaciones sociales: ventajas
Lo primero que hay que señalar es que existen ventajas asociadas al uso de una determinada tecnología, pero no olvides que, en función de la herramienta que se trate, los beneficios pueden matizarse. Y siempre tienes que acercarte a este mundo desde una posición de autoestima. Estos son los principales beneficios de la tecnología en relaciones sociales:
Acercan distancias
El principal beneficio de la tecnología y las relaciones sociales es que se acercan distancias. No en vano, cualquiera de las herramientas que hemos indicado permiten que personas que están a miles de kilómetros se comuniquen.
Facilita la interacción
Otra de las ventajas de estas herramientas es que, con el tiempo, ha mejorado la interacción. ¿Esto qué significa? Por ejemplo, que no solo puedes escuchar a una persona, sino que mediante las videollamadas puedes verla. En consecuencia, la interacción es más auténtica.
Permite conocer gente que de otra forma no conocerías
El desarrollo de los chats en un primer momento, de las redes sociales y, en la actualidad, de las apps para contactar, permite conocer gente de cero que, de otra forma, no conocerías. Esto implica la apertura a distintos ámbitos relacionales y, bien utilizada, es una posibilidad de romper el aislamiento social.
Tecnología en relaciones sociales: desventajas
Sin embargo, la tecnología, en el ámbito de las relaciones sociales, también tiene sus desventajas. ¿Quieres conocerlas? Estas son las más importantes:
Superficialidad
La superficialidad, sobre todo en los primeros momentos de una relación, es común en el ámbito virtual. Al fin y al cabo, tú no ves la cara a la persona con la que hablas la primera vez. Y, si tenemos en cuenta que la mayor parte de la información la conseguimos a través del lenguaje no verbal, esto favorece la superficialidad en los vínculos.
Mayor riesgo de sufrir ghosting
El anonimato está asociado a las relaciones virtuales, y el ghosting es mucho más fácil en este ámbito que en las relaciones presenciales. Hay un mayor riesgo de que esa persona que creías especial desaparezca de un día para otro sin decir nada. Conviene, pues, tener claro que, para dar pasos hacia delante, se requiere mayor prevención.
Las relaciones virtuales no sustituyen las presenciales
Una relación virtual puede ser muy interesante y proporcionar chispazos de dopamina, pero no sustituye a las presenciales. Sobre todo, si se trata de vínculos de pareja o sentimentales, más tarde o más temprano será necesaria la presencialidad. Recordar esto ahorrará desilusiones a medio y largo plazo.
En resumen…
La tecnología en las relaciones sociales ayuda, pero siempre que sepas a dónde vas y a dónde quieres llegar. ¿Tienes problemas para relacionarte? ¿Te gustaría ganar en confianza? Con Emocodificación te puedo ayudar a mejorar. ¡Contáctame para conocerme mejor!